Fotos, Plástica, Otros.
Serie: Sombras del día de Emiliano Pérez.
Esta serie nace de la oscuridad del día, bajo el riesgo de la quietud del silencio.
La serie de 3 ilustraciones que presentamos corresponde a la artista Ana Picone. Los textos que las acompañan también son de su autoría.
Cometierra (Principal) (inspirada en la novela Cometierra de Dolores Reyes)
Cuando tus ojos oran (Izquierda, abajo. Para agrandar la imagen hacer clik sobre la misma)
Un pájaro sostenido (Derecha, abajo. Para agrandar la imagen hacer clik sobre la misma)
Serie: Los japoneses se llevaron el obelisco. Fotos y Photoshop de Horacio Esber.
Serie: Recuerdos. Emiliano Pérez
Foto Principal: Recuerdo de una sonata.
Foto 1: Madre
Foto 2: Espera
La sociedad vigilada. Por Alberto Natán
INSPIRADO EN “VIGILAR Y CASTIGAR” de Michel Foucault
Me hicieron llegar esta foto sacada en el cruce de la ruta que va a Cruz del Eje con la que entra a Los Sauces y San Marcos Sierras, en la provincia Córdoba y este texto:
Esta foto fue cedida a Lit-Pan por Diego Alfaro Palma, quién a su vez cuenta la historia que la acompaña. Así, nuestro lugar web inaugura una nueva etapa, fotos y sus historias contadas por otres.
Acá les dejo esta lindeza.
En los tempranos ochenta del siglo pasado, el grupo Vivencia popularizó una canción cuya letra comenzaba: “…Natalia y Juan Simón están presos/la ley los sorprendió/en un beso/…”.
Esta foto pertenece a Carolina Sella. Ella la subió a sus redes sociales. La vi y creí ver su mundo bifurcado.
Fotógrafo de la casualidad.
Esta foto la tomé en 2011, en Jaipur, India. Lo que tiene de particular no se ve; es que yo estaba trepado, medio cuerpo en el borde superior del muro, apoyado sobre codos y ante brazos. ¿Las piernas?: colgaban al aire.
Continuando con la serie, ahora expongo la foto que tomé a un cementerio en Estocolmo, Suecia. Lo que nos llamó la atención (junto a mis hijas), fue que no sólo estaba en el centro de una manzana rodeada de edificios residenciales. Desde estos se puede acceder al cementerio de modo directo, como si fuera un parque. Vimos también, gente leyendo, que descansaba o charlaba sentada en los bancos. Otras, se notaba, estaban ahí para recordar a sus muertos.
También pudimos observar que están mezcladas las lápidas con sus símbolos religiosos: musulmanes, judíos, católicos, etc.
Creo que, de esta manera, la muerte pierde cierta aspereza entre tenebrosa y dramática.
Horacio Esber